Mensaje del Hermano Mayor tras la Estación de Penitencia 2025
Queridos hermanos y hermanas:
En primer lugar, deseo a todos una feliz Pascua de Resurrección. Ahora que echamos la vista atrás y recordamos todo lo vivido y sentido el pasado Sábado de Pasión, es momento de hacer balance y de dar gracias a Dios por todo lo que nos regaló en ese día en que la Hermandad se reviste de Cofradía.
Desde estas líneas, quiero dar las gracias públicamente al Excmo. y Rvdo. Arzobispo de nuestra Archidiócesis de Sevilla, D. José Ángel Saiz Meneses, por tener a bien recibirnos y concedernos la venia para realizar nuestra Estación de Penitencia en la Parroquia de Ntra. Sra. de los Dolores.
También queremos mostrar nuestro agradecimiento al Rvdo. D. Marcelino Manzano Vilches, Delegado Diocesano para Hermandades, por su coordinación y gestión para que tan emotivo momento pudiera llevarse a cabo. Gracias, un año más, al Rvdo. D. Francisco Javier Brazo, párroco de la Parroquia de Ntra. Sra. de los Dolores, por tener a bien recibirnos nuevamente en su casa. Agradecemos a las queridas Hermandades de Ntra. Sra. de los Dolores y de Ntra. Sra. del Rocío por acogernos en su sede canónica y por el apoyo brindado al cuerpo de nazarenos de nuestra Cofradía.
Gracias a nuestro párroco y director espiritual, D. Santiago González, por su apoyo y sus sabios consejos durante toda la jornada, especialmente en un día complicado e incierto en lo climatológico.
Gracias a toda la Junta de Gobierno por el trabajo realizado durante la Cuaresma.
Gracias a la priostía, por su dedicación para que nuestros pasos lucieran de manera tan hermosa en el día soñado. Gracias a Antonio Bejarano por su trabajo con la Santísima Virgen, y a Javier por el precioso exorno floral.
Quiero mostrar públicamente, y de manera muy especial, mi agradecimiento al Diputado Mayor de Gobierno de nuestra Hermandad, así como al grupo de fiscales, diputados y auxiliares, por su buen hacer y el gran trabajo realizado para que pudiéramos llevar a cabo nuestra Estación de Penitencia.
Gracias a la Agrupación Musical Lágrimas de Dolores y a la Banda de Música de Ntra. Sra. de las Angustias, por acompañar el caminar del Señor de la Salud y Clemencia, y de su Bendita Madre de la Divina Gracia.
Agradecemos a las dos cuadrillas de costaleros, y a sus equipos de capataces al frente, el esfuerzo y sacrificio demostrado durante todo el Sábado de Pasión. Gracias por recuperar el tiempo perdido y llegar puntuales a la Parroquia de Ntra. Sra. de los Dolores. Gracias por llevar con tanto mimo y categoría a nuestros Sagrados Titulares por las calles de nuestra ciudad.
Gracias al cuerpo de nazarenos por su ejemplar comportamiento, su compromiso y su paciencia durante la espera y el discurrir de la Cofradía. Gracias a nuestro barrio y a nuestros vecinos por salir al encuentro de la Hermandad en el gran día del barrio, por engalanar las calles por las que pasaba la Cofradía y por acompañarnos con tanto cariño durante nuestro recorrido por Sevilla.
Al Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla y al Ayuntamiento de la ciudad, nuestro agradecimiento por su colaboración y apoyo durante todo el Sábado de Pasión, especialmente en las primeras horas de la tarde.
Gracias a todos los hermanos y devotos que, con sus aportaciones, han contribuido a engrandecer nuestro patrimonio. Gracias por el amor demostrado hacia nuestros Sagrados Titulares.
Gracias a la Sevilla cofrade que vino a postrarse ante el Señor de la Salud y Clemencia y su Bendita Madre de la Divina Gracia. Gracias por comprender y compartir nuestra forma de creer y de sentir.
Gracias al Taller de José Antonio García Flores por el magnífico trabajo realizado en el nuevo paso del Señor, por su constancia, su cariño y dedicación, para que todo estuviera listo en tiempo y forma.
Ahora es tiempo de soñar con lo vivido y con lo que está por llegar. Tiempo de seguir trabajando juntos para seguir creciendo en Hermandad y cimentar nuevos proyectos. Es tiempo de vivir plenamente la Hermandad y sus cultos, uno de sus pilares fundamentales.
Os muestro, una vez más, mi agradecimiento y mi orgullo por cada uno de vosotros. Cada día estoy más convencido del paso que di hace tres años, que no es otro que, en vuestra compañía, seguir trabajando por hacer una Hermandad más grande. Porque es un orgullo ser hermano de la Hermandad Sacramental de Padre Pío.
Diego Borrego Gómez